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viernes, 8 de julio de 2016

"Tokio Blues" por Haruki Murakami



Y ya había terminado de leer este libro desde hace más de una semana... Peeero, tenía miedo de escribir la reseña, porque verá apreciable lector, he llegado a la conclusión que los autores japoneses y yo, no nos llevamos, lo cual hasta cierto punto resulta curioso, porque el libro "De qué hablo cuando hablo de correr" de Haruki Murakami, me encantó, fascinó y lo que le sigue, probablemente porque el tema tocó cuerdas sensibles en mí... Pero este libroooo, mmmm, mmmmm, mmmmmmm...

¿De qué trata? el protagonista de la historia es Toru Watanabe, un joven que asiste a la Universidad en Tokio y quien vive en una residencia estudiantil (aaah recordé cuando me tocó vivir 1 mes en una "Resi", y compartir el baño y las regaderas con todos los alumnos que íbamos de intercambio... algo no muy grato). Watanabe se caracteriza por ser un muchacho reservado, con pocos amigos, en pocas palabras, alguien "equis". Un fin de semana, paseando por las calles de Tokio, Toru se reencuentra con una vieja conocida: Naoko. Naoko era la novia del mejor amigo de Watanabe, Kizuki, quien se suicidó cuando tenía 17 años.

Naoko y Toru comienzan a salir a partir de ese reencuentro, hasta que Naoko decide irse de Tokio sin dar explicación. Toru se queda perplejo por esa resolución, sin saber qué es lo que pudo haber hecho para que Naoko se fuera. Meses después, Naoko le escribe a Toru para comentarle que se había ido a un tipo "Casa de retiro", ya que no se encontraba bien mentalmente.

Toru decide visitar a Naoko y quedarse unos días con ella en ese peculiar lugar, donde los residentes realizan faenas y demás labores como terapia ocupacional, y al cual no puede considerarse un hospital psiquiátrico, porque no reciben terapias psicológicas o psiquiátricas, sino que la premisa es que los residentes se pueden ayudar unos a otros a tratar de curar el mal que les acongoja.

Por esa misma época, Toru conoce a Midori, una chica medio lurias que estudia algunas materias con él, y de quien logra ser buena amiga (aunque ella quiere ser algo más, pero Watanabe sigue esperando que Naoko se reponga de sus males para continuar con su incipiente relación).

¿Y luego? pues tendrá que leer el libro amable lector, para saber si a Naoko le encuentran el tornillo que se le zafó, o Toru decide quedarse mejor con Midori...

¿Ve? la historia es muy simple, y justo encontré este post donde describe lo que nos pasa a los que no comprendemos la cultura nipona al leer obras de autores japoneses:

" Una de las peculiaridades de la literatura japonesa es la gran importancia de los sentimientos y las sensaciones, sobrepasando a menudo a la importancia del argumento. Es bastante común que leamos literatura japonesa en la que no pasa nada en absoluto, novelas que no tengan apenas argumento. Esto sucede porque para los autores japoneses es mucho más importante transmitir las sensaciones que una buena historia. Podemos encontrar libros en los que se describan paisajes con gran detalle, se hable de la belleza de las flores, de los insectos de verano, de los amores, de recuerdos, pero cuando acabemos el libro llegaremos a pensar: “Un libro muy bonito pero, ¿qué ha pasado?”. La respuesta puede ser: “nada”."

Pues así las cosas mi estimado lector... Yo sé que va a sonar muy mal lo que le digo, y que es posible que me vaya al infierno de los lectores, pero NO ME ENCANTÓ EL LIBRO... Le doy 3 estrellas, nomás por no dejar, pero la verdadera calificación, la guardo en mi corazón...